Cuando el llanto del bebé es desconsolado y no cesa por mucho que tratemos de aplicarle cuidados, es común que nos frustremos al no conocer la causa de lo le está inquietando.
No obstante, cuando el llanto es prolongado durante varias veces a la semana es posible que su bebé esté padeciendo la afección conocida como “cólico del lactante”. Si no conoce en qué consiste este síndrome ni qué posibilidades de tratamiento tiene, se lo contamos desde Centro de Osteopatía Pablo Losada, su clínica de fisioterapia y osteopatía en Vigo de confianza.
¿Qué es el cólico del lactante y cómo identificarlo?
Realmente, casi la mitad de los lactantes pueden experimentar cólicos, los cuales empiezan en torno a la tercera y sexta semana de vida. Lo normal es que estos remitan de manera espontánea cuando el bebé alcanza los cuatro meses de edad. Si pasado este tiempo, usted observa que los síntomas persisten, entonces es necesario consultar con médico de confianza, ya que podría tratarse de otro tipo de dolencia lo que está alterando la tranquilidad de su bebé.
Para saber si se trata de cólico del lactante o de otra afección, puede realizar algunas observaciones en el bebé que le serán de ayuda. Normalmente, los bebés con cólico del lactante tienen un reflejo de succión normal, al igual que el apetito y tampoco presenta problemas de crecimiento. No obstante, si usted observa que su bebé rechaza la comida, tiene un reflejo de succión excesivamente fuerte o está perdiendo peso, deberá también consultar con su médico.
Lo mismo sucede si su bebé vomita en exceso: los niños con cólico del lactante regurgitan de vez en cuando, pero no son habituales los episodios de vómitos continuados.
¿Por qué se produce el cólico del lactante?
No hay una causa única, si bien se cree que algunas intolerancias podrían ser las potenciales responsables de este síndrome. Normalmente, los cambios en la dieta de la madre ayudan a suavizar el cuadro.
Tratamiento del cólico del lactante
Lo cierto es que se trata de una dolencia sin tratamiento específico, para la que se recomiendan variaciones en la dieta de la madre y algún otro tipo de cuidado que ayude a que los cólicos remitan. No obstante, estos suelen desaparecer de forma espontánea cuando el bebé alcanza los cuatro meses de edad.
Lo que sí puede ser de ayuda es aplicar estrategias para calmar al bebé durante un cólico, hasta que estos no mejoren: tomarlo en el regazo, mecerlo o ponerle música relajante.
Si tiene dudas sobre si los cólicos que sufre su bebé son por otro motivo, deberá consultar con su médico de confianza para obtener una valoración personalizada. En Centro de Osteopatía Pablo Losada en Vigo estaremos encantados de atenderle.